Desde hace aproximadamente un año, he estado esforzándome por refrescar mi español. Compré un libro de texto, empecé a ver programas de televisión en español, e incluso me apunté a clases particulares. Sin duda mi español estaba volviendo pero, para ser sincero, no estaba satisfecho con mi progreso y empecé a perder motivación. Dejé de hacer mis deberes e incluso empecé a saltarme mis clases. Finalmente, dejé de ir del todo. Seguí viendo programas de televisión en español porque eso era divertido pero, para entonces, prácticamente había renunciado al proyecto de recuperar mi español.
Más o menos en la misma época, un amigo mío me recomendó el método del shadowing. Al principio, me resistí a la idea. Simplemente no creí que encajara con mi estilo. Pero, finalmente, decidí darle una oportunidad.
He aquí cómo lo hice. Usé algunos CDs con transcripciones de uno de mis libros de texto como material. Escogía un artículo o conversación y la escuchaba sin mirar la transcripción. Después, repasaba el texto y me aseguraba de comprender todo el vocabulario y la gramática. Luego, practicaba repitiendo las frases, haciendo pausas y volviendo a reproducir el audio. Una vez me sentía seguro de mi pronunciación, repetía en voz alta el audio: primero con el texto, después sin él. Tengo el audio en mi iPhone, así que lo hago cuando salgo a pasear. Por cierto, he descubierto que puedo retener las cosas mejor si aplico este método mientras camino. Sólo pasaba entre 20 y 30 minutos al día haciendo esta clase de práctica. Después de haber terminado varios artículos, empecé a revisitar por lo menos un artículo previamente estudiado cada día para reforzar lo que había aprendido.
¿Y los resultados? No podría estar más satisfecho. Enseguida pude sentir que mi español estaba mejorando. Y tengo una intensa sensación de haber logrado algo cuando repito correctamente en voz alta un artículo o diálogo. Con el tiempo, llego a conocer un artículo tan bien, que incluso puedo adelantarme a la persona que habla en varias partes. También sé que mi pronunciación ha mejorado mucho. Me encanta imitar el ritmo y la entonación de un hablante nativo. Y lo mejor de todo es que sigo motivado. De hecho, espero con ansias mis sesiones de shadowing. Y siempre puedo encontrar un momento para encajarlo en mi agenda sin importar lo ocupado que esté.
De hecho, estaba tan entusiasmado con este nuevo método, que me inspiró a crear nuevas lecciones de contenido premium. Mientras estaba practicando con este nuevo método, me hizo pensar en la clase de herramientas que necesitaría para hacer que mi práctica fuera más fácil y eficaz. Pensando desde la perspectiva de un estudiante, empecé a diseñar el formato de mis lecciones.
A continuación he incluido un programa de estudio de una semana típica. Espero que te resulte útil y que puedas hacer del shadowing una parte de tu programa de estudio.